jueves, 30 de julio de 2020

Dimisión de la directiva del Clara Campoamor - Bormujos

La dirección de un colegio de Sevilla, la primera en dimitir en bloque ante la imposibilidad de garantizar la seguridad en septiembre

El rechazo de la Consejería de Educación a algunas de las medidas propuestas por el centro para garantizar los desdobles y los grupos de convivencia llevan al director y su equipo a renunciar a sus puestos en una decisión que definen como honesta
— El profesorado se rebela contra la falta de seguridad en los planes de vuelta al colegio para septiembre


Carmen Ibáñez
29 de julio de 2020 15:11h
@carmenciti

Manuel Ramírez lleva 12 años al frente del Colegio de Educación Infantil y Primaria Clara Campoamor, en la localidad sevillana de Bormujos. Él, junto al jefe de estudios y la secretaria, se han convertido en el primer equipo directivo de un centro escolar público en renunciar en bloque a sus funciones ante la imposibilidad de cumplir con las medidas de seguridad impuestas por Educación y Sanidad para el regreso a las aulas con los medios de los que disponen.

Presentaron su dimisión a la Consejería de Educación el pasado 24 de julio tras ver rechazadas algunas de sus propuestas que, entre otras cuestiones, pasan por modificar las horas lectivas de determinadas asignaturas consideradas “no esenciales” para hacer posible los desdobles de clases. La asociación de padres y madres del centro ha apoyado esta drástica decisión que aún no ha tenido respuesta por parte de la Consejería, según explica a este periódico el propio Ramírez, que admite, no obstante, que habrá opiniones contrarias entre los más de 1.000 padres y madres que pertenecen a su centro.

“Me da la sensación de que la única propuesta [de la Consejería de Educación] es volver a las clases embadurnados en gel hidroalcohólico y con mascarillas”, lamenta el aún director de este colegio que cuenta con 677 alumnos. “Cuando los padres y madres me preguntan por las medidas de seguridad, se me cae la cara de vergüenza, así que creo que la postura más honesta que me queda es decir que no puedo garantizar la seguridad en el centro”, explica Ramírez, quien defiende esta medida como una reacción “a la pasividad de la administración”. “Nos sentimos mal, pero no nos queda otro camino”, dice.

miércoles, 29 de julio de 2020

Regreso a la nueva realidad escolar - Andalucía

Los profesores andaluces se rebelan contra los planes de vuelta a clase

Crece el malestar entre los directores de centros y los padres ante la imposibilidad de elaborar y ejecutar los protocolos ante la covid por falta de formación y medios

EVA SAIZ

Sevilla - 27 JUL 2020 - 09:08 CEST

“Somos maestros, no superhéroes y tenemos que planificar un arranque de curso en el que se nos exige hacer cosas que no podemos. Aunque me dotaran de más profesores, necesitaría un colegio más grande para garantizar la seguridad. Con mimbres solo podemos hacer canastos, no jarrones de la dinastía Ming”. Así de rotunda ilustra su angustia Adela, una maestra de un colegio de la zona del Polígono Norte de Sevilla —una de las más humildes de la capital—, que prefiere no dar su nombre real ni el del centro. El próximo 1 de septiembre asumirá el cargo de directora.

Su escuela se ha adherido a la carta que esta semana han remitido a la Consejería de Educación 60 centros educativos de la capital andaluza en la que muestran su rechazo a que se haya cargado sobre los centros la responsabilidad de elaborar los protocolos de seguridad frente al coronavirus. Las escuelas advierten de la imposibilidad de cumplirlos por falta de profesores y de medios. Un malestar que se extiende por toda la región y al que se acaban de sumar los centros de la provincia de Sevilla y que comparten las asociaciones de familias, los sindicatos y muchos Ayuntamientos.

Respuestas educativas para una pandemia

Las instrucciones que la Consejería de Educación hizo públicas el 6 de julio aluden a la “autonomía de los centros” y dejan en manos de los equipos directivos toda la responsabilidad en la redacción de un protocolo de actuación covid-19. En ese documento, los directores deben establecer las medidas de seguridad respecto a la entrada y salida a los centros, los desplazamientos de los alumnos por los mismos, su distribución en las aulas, o el desarrollo de los servicios de aula matinal o comedor. Además, deben contemplar la actuación a seguir en caso de sospecha o confirmación de un positivo, así como el establecimiento de grupos reducidos de convivencia escolar, conocidos como “grupos burbuja”, cuyo fin es conseguir que los estudiantes permanezcan aislados del resto de grupos y estén atendidos únicamente por uno o dos docentes.